Fuente: Marca Claro

Si te has encontrado con alguno de estos pulpos reversibles en la calle o a través de redes sociales, como Facebook, habrás notado que están de moda y además, una tendencia entre las personas.

Estos simpáticos peluches, creados por la empresa TeeTurtle, están por todos lados y cada vez es más grande su popularidad, a tal grado de que mucha gente ya tiene el suyo, o bien, pregunta dónde puede conseguirlo.

Una de las características principales de estos pulpos se encuentra en el estado de ánimo que reflejan, pues de un lado se muestran felices, pero por el otro proyectan un rostro enojado o triste. Eso sí, los hay en todos los colores, desde azul claro, pasando por rosa pastel, amarillo, fucsia, crema y gris, hasta llegar al negro y están diseñados para niños de seis años en adelante.

¿Para qué sirven los pulpos reversibles?
Los pulpos reversibles podrían tener no sólo el objetivo de divertir y entretener a los niños, sino que también existe la teoría de que su verdadera función es la de facilitar la comunicación de las emociones en los pequeños que padecen de autismo, síndrome de asperger o TDAH, lo que los convertiría, en realidad, en una herramienta terapéutica.

Esta hipótesis no ha sido confirmada por TeeTurtle, compañía que no se ha manifestado al respecto, ni tampoco por algún experto en el tema. Sin embargo, los pulpos reversibles han sido todo un éxito en TikTok y cada una de las distantes redes sociales, al grado de encontrarse ya a la venta en las calles de la Ciudad de México y tianguis, sin faltar los vendedores ambulantes en las estaciones del metro de la Ciudad de México.

¿Qué es el autismo?

Es un trastorno psicológico que se caracteriza por la intensa concentración de una persona en su propio mundo interior y la progresiva pérdida de contacto con la realidad exterior.

Los trastornos del espectro autista (TEA) se encuadran dentro de los trastornos del neurodesarrollo y se definen por las alteraciones relacionadas con la comunicación y la interacción social, además de presentar conductas repetitivas e intereses fijos.

Las personas que sufre de TEA muestran discapacidad intelectual, además de problemas del lenguaje y se estudia si hay una afección médica asociada.