Berenice Tépach González
San Andrés Tuxtla, Ver.-
Reina Hernández Jiménez, integrante del Maretux- Meliponicultoras Agroecologicas de los Tuxtlas Veracruz dentro de sus actividades está la siembra de semillas nativas de la regióm para la protección de la captotrigona mexicana, una especie de abeja fundamental para el ecosistema local.

La siembra de plantas nativas, como la flor de cempasúchil, no solo proporciona alimento a las abejas, sino que también asegura que no se dañen otros polinizadores.
«Es crucial que las abejas consuman polen de flores aptas para su salud. Cuando se alimentan de polen de otras flores, se enferman, lo que puede llevar a la extinción de la especie», advierte Reina.
La problemática se agrava con la siembra de maíz transgénico, que afecta a los cultivos de maíz criollo. «Las variedades de maíz transgénico no producen la misma cantidad ni calidad, lo que impacta a quienes dependen de estos cultivos», explica. Esto resalta la importancia de sembrar semillas nativas para garantizar un ecosistema equilibrado.
En la actualidad, el colectivo Maretux se enfoca en cultivar principalmente el cempasúchil, que es esencial para el ecosistema local. «Hasta ahora, solo hemos sembrado dos variedades de esta flor, el amarillo fuerte y el amarillo más bajito», menciona Reina.
Este colectivo está conformado por 12 comunidades de cinco municipios: Catemaco, Santiago, Ángel R Cabada, Soteapan y Huayepan de Ocampo.
Invitar a la ciudadanía a cuidar y preservar a las abejas sembrando semillas nativas que favorezcan la biodiversidad.
«Más que nada, necesitamos que la gente siembre semillas nativas de diferentes tipos para conservar a los polinizadores. Cada acción cuenta», concluye Reina.
Con su labor, el colectivo Maretux se posiciona como un referente en la conservación del medio ambiente y la promoción de prácticas agrícolas sostenibles en la región.

