- Perredistas sin dignidad y valores que recibieron la represión se tiran a sus pies y atacan a Morena para defender a los Yunes
Por: Jesús Córdova Salas
San Andrés Tuxtla Ver.-El 31 de Diciembre de 1994 minutos antes del mediodía, cientos de perredistas de San Andrés Tuxtla y la región fueron atacados con gases lacrimogenos, garrotes y disparos de arma de fuego. Miguel Ángel Yunes Linares entonces secretario de gobierno de la administración del gobernador priista Patricio Chirinos Calero, dió la orden de desalojarlos con la fuerza pública, quitarlos de la entrada del palacio municipal y el parque Lerdo de San Andrés Tuxtla era la indicación si ó si
El saldo de esa represión fue un perredista asesinado de nombre Marcelino Seba y muchos otros heridos y detenidos.
Era la década de los 90, el auge de la izquierda había agarrado muchísima fuerza en Los Tuxtlas, y en 1994 con la marcha denominada éxodo de la democracia que encabezó el ahora presidente Andrés Manuel López Obrador el principal bastión del PRD de Veracruz se encontraba en esta región de LosTuxtlas, pues a su paso por esta zona AMLO había dejado un movimiento muy fuerte en la lucha de izquierda.
Era precisamente ese fin de año del 94 que los perredistas habían tomado la entrada del palacio municipal y se manifestaban en el parque central para impedir la toma de protesta del priista Enrique Huber quién había ganado la alcaldía inflando urnas, argumentaban los perredistas.
Después de varios días de negociación incluso a nivel nacional, los acuerdos se cayeron, fue por eso que de inmediato Miguel Ángel Yunes mandó a su secretario particular Enrique Pérez a San Andrés con la indicación de pedirles que se quitaran en cuestión de minutos, de lo contrario los quitarían a la fuerza.
Aferrados como todo militante de izquierda hicieron caso omiso a la orden de Enrique Pérez, los del PRD encabezados por el doctor Tenorio candidato al que le habían robado la elección, estaban dispuestos a resistir y enfrentar la represión. Fue entonces que un contingente de elementos de la policía estatal dirigidos por el comandante al que apodaban El Diablo, llegaron hasta el parque y comenzó el enfrentamiento, los perredistas bravos estaban dispuestos a dar la vida por no ver pisoteados sus derechos electorales. Y así fue, entre el disturbio donde hubo gases, bombas molotov y balazos, un perredista cayó baleado y en cuestión de minutos murió, otros más resultaron heridos y encarcelados.
Lo triste de todo eso es que la lucha de hace 30 años ha sido olvidada y pisoteada por perredistas que hoy se rinden a los pies de Yunes Linares para apoyar a su hijo en la candidatura al senado.
Uno de esos personajes del PRD es el actual dirigente municipal Aldo Sánchez Aguirre, quién estuvo en la represión, recibió golpes y fue detenido junto a su hermano Francisco Sánchez Aguirre (Pichirilo) este último también encarcelado por segunda ocasión en 2017 por Yunes Linares cuando fue gobernador por dos años.
Penosamente hoy personajes como el dirigente del PRD en San Andrés Tuxtla han perdido la dignidad y defienden a capa y espada a quién antes ordenaba golpearlos, encerrarlos y hasta matarlos.
Y hablamos también de perredistas de Cabada, Santiago Tuxtla y Catemaco, no solo de San Andrés.
Todo esto viene a la memoria porque ayer visitaron esta ciudad los candidatos al senado Miguel Ángel Yunes Márquez y su padre Miguel Ángel Yunes Linares, en una reunión en el club de leones criticaron al actual gobierno morenista y pidieron el respaldo del voto de los ciudadanos que mandaban a golpear y de un PRD que está agonizando.
Si don Marcelino Seba resucitara quizás se volvería a morir de ver en lo que ahora se ha convertido el partido del sol Azteca.