Alberto Calderón P.

Una nueva forma de comunicarnos ha surgido provocada por el confinamiento y es la comunicación auditiva y visual, donde grupos de personas que van desde los 5 hasta los 200 participantes pueden interactuar, pero no solo eso, también son capases de crear y compartir la cultura.
En una innovadora forma a la que se están integrando niños, jóvenes, adultos de cualquier edad para verse, sentir que los amigos siguen ahí, escuchar sus voces y sobre todo verlos se ha convertido en algo sorprendente, en una plataforma compartida en tu pantalla. Puedes ver conciertos en vivo con integrantes que desde sus casas tocan de forma coordinada sus instrumentos, cantan o actúan no solo los famosos y reconocidos, hemos visto familias, grupos de amigos o desconocidos entonando canciones desde distintos puntos de una ciudad o un país, es algo maravilloso, muchos usuarios se lo están perdiendo por la timidez o el desánimo a llevar adelante una videoconferencia, así se llama la plataforma en donde confluyen muchas personas para convivir y compartir.

El inicio de una sesión virtual es como la llegada a un salón de clases, saludarse los puntuales, ver las normales dificultades que representa para muchos usuarios esta nueva forma de interactuar, que es relativamente fácil, con unos cuantos movimientos uno se encuentra al lado de otros que por primera vez participan un poco desconcertados, pero a medida que estas videoconferencias se vuelven más comunes la familiaridad con el programa y la participación se hace cada vez más fluida.

Esta herramienta que ya existía a medida que nos fuimos alejando de las calles y nuestra vida la empezamos ha hacer en la casa debido al Coronavirus. Plataformas como Zoom que se volvió la más popular, ahora tenemos varias que ofrecen este servicio gratuito, no se sabe si su popularidad se deba a lo fácil de la palabra, pero ahora al momento cuenta con más de 300 millones de usuarios cuando a finales del año pasado andaba por los 10 millones.

La pantalla compartida nos hace sentir que si bien estamos separados no estamos aislados, podemos interactuar desde nuestros sitios, es una experiencia que estando en cualquier lugar teniendo la dirección correcta entras, no importando que sitio te encuentres siempre que tengas una conección a Internet y descargada la aplicación. Esta forma de comunicarnos ha servido para continuar con las clases en forma virtual, es importante mencionar las desventajas al saber que no todos los alumnos en edad escolar cuentan con internet y una computadora o tableta para poder recibir sus clases virtuales, pero muchos de ellos si lo pueden hacer, debemos propugnar por hacer realidad el compromiso del presidente de Internet para todos y el dotar a los alumnos de una computadora o tableta en un futuro próximo. A uno de mis hijos lo he visto dando clases virtuales y es sorprendente como la comunicación entre alumnos y maestro ofrecen otras posibilidades en el aprendizaje, las preguntas, las tareas con otra plataforma, el interés que ha despertado en muchos alumnos esa innovadora forma de recibir las asignaturas es algo digno de comentarse. Para muchos maestros es difícil integrarse a estas nuevas herramientas, a estos nuevos procesos educativos, pero lo han hecho muy bien, nadie creo que hasta el momento a valorado su esfuerzo, es el momento de hacerlo una vez que regresemos a la nueva normalidad. También servirá para incentivar a seguir estudiando a mucha gente que ha dejado truncada una carrera, las posibilidades son enormes. ¿Usted ya ha participado en una videoconferencia?, si no lo ha hecho es el momento de integrarse. Nosotros estamos ofreciendo talleres virtuales ¡Anímese!

Xalapa2000@hotmail.com

Miembro de la Red Veracruzana de Comunicadores (REVECO)