• Lo lúdico y cuantificable

Alberto Calderón P.

El dictamen sobre el uso médico y recreativo de la marihuana en nuestro país recayó en las comisiones de salud, justicia y estudios legislativos del senado, quienes aprobaron en lo general su uso para mayores de 18 años.

Primero me referiré a los antecedentes que permitieron se abriera el debate, esto tiene que ver con una política más flexible en los Estados Unidos quienes ya tienen regulaciones en 27 estados de distintas formas, países como Uruguay y Canadá en donde está permitido su uso lúdico y el debate que se abrió en México a partir del papel que jugó la Sociedad Mexicana de Autoconsumo Responsable y Tolerante (SMART), en donde su amparo promovido falló a su favor ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Entre los resolutivos se encuentra la indebida restricción a los derechos de identidad personal, la autodeterminación y la libertad individual.

Desde la perspectiva internacional los consumidores no deben ser tratados como criminales, en el caso de nuestro país la marihuana es la sustancia ilícita que más se utiliza y presenta los menores daños asociados a su consumo.

Los datos de la PGR entre 2006 y 2014 nos indican que fueron detenidas 156 mil personas por consumo pasando por alto que esto no es un delito, entre estos años el 58% fueron detenidos por posesión para el consumo o posesión simple. El 38.5% de las personas sentenciadas en 2012 por posesión simple, un año antes se encontraban recluidas 1509 personas por consumir, ya en ese mismo año una encuesta indicaba que al menos el 6% de los mexicanos había probado al menos en una ocasión la marihuana como lo indica Catalina Pérez Correa y Jorge Javier Romero Vadillo en su artículo “Marihuana Cómo” publicado en la Revista Nexos. En general no es una sustancia adictiva y lleva pocos riesgos su consumo como lo indica Herminia Pasantes del Instituto de Fisiología Celular de la UNAM, agrega que su consumo ocasional o moderado no afecta las funciones cerebrales.

Por ello para no seguir criminalizando a los consumidores se requiere de una reforma que cambie la tabla de dosis mínima y las cárceles no estén llenas de consumidores mientras los traficantes se encuentran libres.

Ante ese panorama la comisión encargada de la reforma tuvo 26 votos a favor y 7 en contra en la comisión del senado, se dictaminó en lo general el uso recreativo a mayores de 18 años y la posesión simple pasó de 5 a 28 gramos la cantidad permitida para consumo personal.

Quedará estrictamente prohibido su uso a menores de edad, y prohibido su consumo en áreas públicas, a quienes infrinjan estas normas se harán acreedores a una multa de 3.4 millones de pesos.

Aun faltan aspectos por legislar y definir, la venta y distribución, si habrá registro de consumidores, como contrarrestar la ferocidad de las empresas que ya buscan un espacio para entrar en el fructífero negocio regulado del cannabis. La adecuación publicitaria o si esta será nula, los derivados como comestibles, bebidas y un sinfín de productos que se pueden generar a partir de la marihuana y que estos no lleguen a los menores de 18 años, este será un reto grande para el gobierno o usted querido lector ¿qué opina? Xalapa2000@hotmail.com

Miembro de la Red Veracruzana de Comunicadores (REVECO)